El reglamento europeo de reutilización del agua y la directiva de calidad de las aguas de consumo humano. Principales novedades

Abstract

Desde muy pronto Europa se preocupó por la gestión de los recursos hídricos, aunque ciertamente lo ha venido haciendo muy centrada en sus aspectos cualitativos, esto es, en las cuestiones relativas a la calidad de las masas de agua, no tanto en los problemas derivados de su escasez o carestía. En la larga trayectoria de la política y normativa europea sobre medio ambiente y agua el Pacto Verde vino a centrar el camino a seguir en torno a un nuevo propósito: el de la neutralidad climática. En efecto, el Pacto Verde Europeo instauró una nueva estrategia de crecimiento para una sociedad europea equitativa cuya economía ha de ser eficiente en el uso de los recursos. A tal efecto, inició una estrategia concertada con la que avanzar hacia una economía climáticamente neutra, eficiente en el uso de los recursos y competitiva. Para materializar sus objetivos y políticas, el Pacto Verde Europeo incorporó una hoja de ruta con acciones para impulsar el uso eficiente de los recursos mediante el paso a una economía limpia y circular y detener el cambio climático, revertir la pérdida de biodiversidad y reducir la contaminación . En la base de la estrategia se encontraba aprobar la primera Ley Europea del Clima, reforzar la economía circular a través de un nuevo plan y aprobar un plan de contaminación cero para el aire, el agua y el suelo. Este es el marco en el que se encuadran las normas más relevantes en materia de agua aprobadas últimamente por Europa y de cuyas principales novedades vamos a dar testimonio en este trabajo.