Severidade punitiva na violência de género : perspetiva jurídico-psicológica da resposta judicial em Cabo Verde

Abstract

La violencia de género contra las mujeres, considerada uno de los crímenes más antiguos de la historia de la humanidad, sigue siendo uno de los delitos menos condenados por el sistema de justicia penal en todo el mundo. A pesar de la existencia de algunos estudios sobre la violencia de género y la respuesta de la justicia penal en este ámbito, el fenómeno ha recibido poca o ninguna atención en el contexto africano, especialmente en Cabo Verde. En este país, a pesar de la creación de la ley especial de penalización de la violencia basada en género en 2011, el aumento de los casos denunciados ante las instancias judiciales, el decalaje entre éstos y el número de casos juzgados, unido a los escasos estudios en este campo, justifican la necesidad de profundizar en la investigación del fenómeno objeto de estudio. En este contexto, el objetivo de esta investigación era analizar la severidad punitiva de las decisiones judiciales en crímenes de violencia basada en género contra mujeres, la inclusión o no de profesionales de la psicología como soporte técnico a decisiones judiciales, y, por último, qué factores influyen sobre esas decisiones. Nuestro estudio se presenta con una metodología cuantitativa, con un diseño de carácter descriptivo y correlacional. Se ha analizado una muestra de 72 procesos judiciales con sentencias definitivas, circunscribiéndose a parejas heterosexuales, con víctimas femeninas y agresores masculinos. Para evaluar la severidad de las medidas penales y, al mismo tiempo, comprobar si se tienen en cuenta los conocimientos psicológicos en materia judicial, se utilizó el Índice de Severidad Penal y psicologización (Criminalización Secundaria) - Revisado - ISPP-CS-R. Los resultados mostraron que la severidad penal en el delito de violencia de género contra la mujer es baja y la psicologización nula. Se analizó la relación entre las variables edad, nivel de escolaridad, antecedentes criminales, tenencia de armas, hospitalización de la víctima y severidad penal. Los resultados mostraron que sólo el nivel de escolaridad y los antecedentes criminales se correlacionan con el índice de la severidad penal. Para determinar en qué medida estos dos factores explican la variación de este índice, se realizó un análisis de regresión múltiple. Los resultados muestran que cuanto menor es el nivel de escolaridad del agresor, mayor es la severidad penalizadora y evidencian que la sanción a los agresores con antecedentes criminales es más severa que la aplicada a los agresores sin antecedentes criminales. Estudio adicional Teniendo en cuenta los resultados del estudio principal, descrito anteriormente, hemos querido evaluar, a partir de un estudio adicional, la percepción social de la violencia de género contra las mujeres, en términos de gravedad, frecuencia y aceptabilidad, y analizar si el género, la edad y el nivel de escolaridad influyen en esta percepción. Participaron 256 residentes de diferentes islas de Cabo Verde, que respondieron a una encuesta online sobre la percepción de gravedad de los diferentes tipos de violencia contra las mujeres – física, psicológica, económica y sexual. Los resultados mostraron que los cuatro tipos de violencia fueron percibidos como graves, siendo la violencia física la más grave de todas las formas de violencia. En cuanto a la frecuencia de la violencia de género, más de la mitad de los participantes opina que es un delito frecuente. En cuanto a la aceptabilidad, la gran mayoría de los participantes consideró que la violencia de género contra la mujer inadmisible y debe ser punida por la ley. Al analizar las respuestas según el género, se observaron diferencias significativas en cuanto a la gravedad, la frecuencia y la aceptabilidad, ya los participantes del género femenino perciben los diferentes tipos de violencia como más graves, más frecuentes y menos aceptables que los participantes del género masculino. Según el nivel de escolaridad, únicamente se ha encontrado significancia estadística en la gravedad de la violencia psicológica, en que la escolaridad más elevada está relacionada con una percepción de gravedad superior. No se observaron relaciones significativas entre la edad y la gravedad, la frecuencia y la aceptabilidad de la violencia de género contra la mujer. En conclusión, podemos decir que parece existir una discrepancia entre la forma de actuar del sistema judicial respecto al crimen de violencia de género contra la mujer y la percepción social respecto a la gravedad y aceptabilidad de este tipo de violencia.

Considered to be one of the oldest crimes in human history, gender-based violence against women is still one of the most under-sentenced crimes worldwide. Although there have been some studies on gender-based domestic violence and criminal justice response to it, the issue has received little to-no-attention in the African context, particularly in Cabo Verde. Despite having created a law in 2011 criminalising gender-based violence, and an increasing number of cases being reported to the Cabo Verde criminal justice system, the number of cases put on trial is still scarce and has received little research attention. The objective of this research was to analyse the severity of punishment applied to cases in which the victims were women, and the perpetrators were men. 72 cases with a final decision were examined, both to assess the severity of punishment and, to ascertain whether psychological/psychiatric knowledge was included in the judicial response, using the Punishment Severity and Psychologization Index (Secondary Criminalization) – Revised. The results showed that the severity of punishment of gender-based violence is low, and psychologization is null. While the relationship between age, level of education, criminal record, possession of weapons, victim hospitalisation and punishment severity were analysed, the results showed that only the level of education and criminal record correlate significantly with the punishment severity index. A multiple regression analysis was carried out to determine to what extent these two factors explain the variation in this index. It was found that the lower the perpetrator’s education level, the harsher the punishment severity, and that perpetrators with a criminal record received harsher punishments than those without a criminal record. In light of these findings a further study into the social perception of gender-based violence against women, in terms of severity, frequency and acceptability, and to analyse whether gender, age and level of education influence this perception was conducted. In this study, 256 individuals from different Cape-Verdean islands completed an online survey about various types of gender-based violence, including sexual, physical, psychological, and economic violence. The findings demonstrated that all four forms of violence were perceived as serious, with physical violence being the most serious. Most respondents believed gender-based violence to be a frequent crime, which they considered to be unacceptable and should be punished by law. Analysing the answers according to gender, statistically significant differences were found in terms of severity, frequency, and acceptability, with female participants considering the various types of violence as more severe, more frequent and less acceptable than male participants. Level of education was only statistically significant regarding psychological violence - respondents with a higher level of education considered this type of violence to be more serious than those with a lower level of education. No significant relationships were observed between age and the severity, frequency and acceptability of gender-based violence. In conclusion, there seems to be a discrepancy between the way the judicial system in Cape Verde responds to this crime and the social perception regarding the severity and acceptability of this type of violence.