Evaluación de la eficacia de un programa de tratamiento en adicciones

Abstract

Los trastornos por abuso de drogas constituyen uno de los problemas de salud pública más importantes, por lo que el desarrollo de programas de tratamiento eficaces es un asunto de relevancia. El modelo o enfoque biopsicosocial es un modelo general, que plantea que los factores biológicos, psicológicos y sociales, juegan un papel importante en el funcionamiento humano en el contexto de la enfermedad y de la percepción de la misma. Lo más importante que aporta este modelo frente al biomédico, es que el problema de la adicción, como cualquier otro problema o comportamiento humano incluye un aspecto biológico lo cual no quiere decir que este sea la única causa del comportamiento por sí mismo. Las adicciones vienen causadas por múltiples factores y no por un factor único, y por tanto hablaríamos de una causalidad multifactorial del consumo de drogas. El principal problema ya no es la sustancia sino la persona y las relaciones que establece con su entorno cultural, teniendo en cuenta su contexto y con los otros. Se requiere, por tanto, que estas intervenciones sean objeto de una evaluación científica en relación a los efectos terapéuticos beneficiosos esperados para cada una de ellas. Siendo las terapias psicosociales las más avaladas por el estado actual de la investigación. El programa de tratamiento objeto de estudio se dirige a personas con problemas de adicción y con una importante desestructuración social y familiar, constando de cuatro fases: Evaluación y diagnóstico, motivación, Comunidad Terapéutica y Autonomía o Reinserción. El primer estudio constó de una evaluación del perfil psicopatológico por género de las personas usuarias del programa a través de una metodología transversal, mientras que el segundo consistió en un estudio longitudinal comparando la severidad de los problemas adictivos de una muestra de personas tratadas a lo largo de 12 meses en tratamiento. Los resultados evidenciaron una alta influencia del tiempo en tratamiento sobre el impacto del programa en los procesos adictivos, así como diversos efectos de perfiles psicosociales sobre la retención y otros problemas de salud mental. Lo que señala la importancia de realizar procesos de tratamiento acordes a las necesidades específicas que puedan necesitar.

Drug abuse disorders are one of the most important public health problems, and the development of effective treatment programs is a matter of relevance. The biopsychosocial model or approach is a general model that posits that biological, psychological, and social factors play an important role in human functioning in the context of disease and its perception.The most relevant part about this modelit’s that contributes compared to the biomedical model is that the problem of addiction, like any other problem or human behavior, includes a biological aspect, which does not mean that this is the only cause of the behavior itself.Addictions are caused by multiple factors and not by a single factor, and therefore we would speak of a multifactorial causality of drug use. Therefore, it is required that these interventions be subject to a scientific evaluation in relation to the beneficial therapeutic effects expected for each one of them. Being psychosocial therapies the most endorsed by the current state of research. The treatment program under study is aimed at people with addiction problems and significant social and family breakdown, consisting of four phases: Evaluation and diagnosis, motivation, Therapeutic Community and Autonomy or Reintegration. The first study consisted of an evaluation of the psychopathological profile by gender of the users of the program through a cross-sectional methodology, while the second consisted of a longitudinal study comparing the severity of the addictive problems of a sample of people treated over a period of time. 12 months in treatment. The results showed a high influence of time in treatment on the impact of the program on addictive processes, as well as various effects of psychosocial profiles on retention and other mental health problems. This indicates the importance of carrying out treatment processes that aim to assess the specific needs that the users carry.